Varilla
04-09-2013, 02:15 PM
A punto de una nueva edición de este juego anual, el FIFA 14, han salido a la luz en estos días detalles inéditos del juego que inició todo, el FIFA International Soccer:
Creadores revelan las claves del primer FIFA Electronic Arts siguió sin confiar en el potencial del juego porque el deporte, en EE.UU., no tenía apenas popularidad y no veían claro que pudiera vender bien.
(https://twitter.com/share)
Neil Thewarapperuma, responsable de publicidad para EA Sports en Europa en los años noventa, ha desvelado las claves del nacimiento de la saga de fútbol FIFA de la compañía, incluyendo el hecho de que la empresa no confiaba en el título y estuvo a punto de cancelarlo varias veces.
La situación en la que se originó el juego fue una bastante singular: ESN (EA Sports Networks, ahora EA Sports) tenía ya dos grandes éxitos en EE.UU. gracias al hockey y el fútbol americano con las sagas NHL y Madden, pero no conseguía reproducir su éxito en Europa por el escaso interés de estos deportes en la región.
Un mercado de Sensible Soccer y Kick Off
El director de publicidad de la central europea de Electronic Arts de la época, David Gardner, explica que -lógicamente- los estudios indicaban que los usuarios europeos querían fútbol, pero en esa época el mercado estaba dominado por las sagas Sensible Soccer y Kick Off.
Varios miembros del Reino Unido, así como Bruce McMillan de EA Canadá, presionaron a la directiva para que apoyaran un proyecto de fútbol que pudiera luchar en el mercado contra los otros títulos. “Dije que teníamos que estar en el negocio mundial del fútbol”, rememora McMillan.
Dos creadores independientes y una Mega Drive
Cuando consiguieron que se aprobara el proyecto, este se encargó a dos desarrolladores independientes, entre los que estaba Jules Burt, que entonces trabajaba en Cheshire (Reino Unido) y la producción corrió a cargo de Matt Webster, quien recuerda que “estos chicos tenían un kit de desarrollo de Mega Drive. No sé cómo lo tenían y seguramente no quería saberlo, porque en ese momento EA ni siquiera podía acceder a uno”.
Webbster recuerda que les hicieron tres demostraciones, y una de un juego de voleibol con perspectiva isométrica captó especialmente su atención y decidieron apostar por ella en oposición a los rivales, que tenían cámara cenital. Estos desarrolladores independientes fueron contratados para integrarse en el estudio de Vancouver (Canadá). El objetivo, explica McMillan, era llevar el realismo de las sagas NHL y Madden al fútbol para diferenciarse de sus competidores. “Tenía que sentirse auténtico, sentirse correcto”, rememora.
A punto de ser cancelado en multitud de ocasiones
Electronic Arts siguió sin confiar en el potencial del juego porque el deporte, en EE.UU., no tenía apenas popularidad y no veían claro que pudiera vender bien. Asimismo, consideraban que las ventas en Europa -que era su mercado objetivo- no iban a ser suficientes. Además, recuerdan que cuando consiguieron el acuerdo con la FIFA para utilizar su nombre en el juego, no sabían que eso no implicaba ninguna liga, equipo ni jugador porque la organización no funcionaba todavía de forma comercial como sucede hoy en día, razón por la que se inventaron los nombres de los jugadores (y pusieron los propios en equipos como Francia, Reino Unido y otros). Toda la negociación fue por iniciativa propia de los desarrolladores y fueron ellos mismos quienes firmaron el acuerdo. Hoy en día la situación es muy diferente y creen que la estructura de negocio de la FIFA y las ligas lo es, en parte, por las demandas que la desarrolladora fue haciendo año tras año para sus videojuegos.
Creadores revelan las claves del primer FIFA Electronic Arts siguió sin confiar en el potencial del juego porque el deporte, en EE.UU., no tenía apenas popularidad y no veían claro que pudiera vender bien.
(https://twitter.com/share)
Neil Thewarapperuma, responsable de publicidad para EA Sports en Europa en los años noventa, ha desvelado las claves del nacimiento de la saga de fútbol FIFA de la compañía, incluyendo el hecho de que la empresa no confiaba en el título y estuvo a punto de cancelarlo varias veces.
La situación en la que se originó el juego fue una bastante singular: ESN (EA Sports Networks, ahora EA Sports) tenía ya dos grandes éxitos en EE.UU. gracias al hockey y el fútbol americano con las sagas NHL y Madden, pero no conseguía reproducir su éxito en Europa por el escaso interés de estos deportes en la región.
Un mercado de Sensible Soccer y Kick Off
El director de publicidad de la central europea de Electronic Arts de la época, David Gardner, explica que -lógicamente- los estudios indicaban que los usuarios europeos querían fútbol, pero en esa época el mercado estaba dominado por las sagas Sensible Soccer y Kick Off.
Varios miembros del Reino Unido, así como Bruce McMillan de EA Canadá, presionaron a la directiva para que apoyaran un proyecto de fútbol que pudiera luchar en el mercado contra los otros títulos. “Dije que teníamos que estar en el negocio mundial del fútbol”, rememora McMillan.
Dos creadores independientes y una Mega Drive
Cuando consiguieron que se aprobara el proyecto, este se encargó a dos desarrolladores independientes, entre los que estaba Jules Burt, que entonces trabajaba en Cheshire (Reino Unido) y la producción corrió a cargo de Matt Webster, quien recuerda que “estos chicos tenían un kit de desarrollo de Mega Drive. No sé cómo lo tenían y seguramente no quería saberlo, porque en ese momento EA ni siquiera podía acceder a uno”.
Webbster recuerda que les hicieron tres demostraciones, y una de un juego de voleibol con perspectiva isométrica captó especialmente su atención y decidieron apostar por ella en oposición a los rivales, que tenían cámara cenital. Estos desarrolladores independientes fueron contratados para integrarse en el estudio de Vancouver (Canadá). El objetivo, explica McMillan, era llevar el realismo de las sagas NHL y Madden al fútbol para diferenciarse de sus competidores. “Tenía que sentirse auténtico, sentirse correcto”, rememora.
A punto de ser cancelado en multitud de ocasiones
Electronic Arts siguió sin confiar en el potencial del juego porque el deporte, en EE.UU., no tenía apenas popularidad y no veían claro que pudiera vender bien. Asimismo, consideraban que las ventas en Europa -que era su mercado objetivo- no iban a ser suficientes. Además, recuerdan que cuando consiguieron el acuerdo con la FIFA para utilizar su nombre en el juego, no sabían que eso no implicaba ninguna liga, equipo ni jugador porque la organización no funcionaba todavía de forma comercial como sucede hoy en día, razón por la que se inventaron los nombres de los jugadores (y pusieron los propios en equipos como Francia, Reino Unido y otros). Toda la negociación fue por iniciativa propia de los desarrolladores y fueron ellos mismos quienes firmaron el acuerdo. Hoy en día la situación es muy diferente y creen que la estructura de negocio de la FIFA y las ligas lo es, en parte, por las demandas que la desarrolladora fue haciendo año tras año para sus videojuegos.