Jumoge
03-02-2015, 11:45 AM
Reproducción asistida »
Reino Unido debate hoy autorizar el primer bebé con tres padres genéticos
La técnica ayudaría a cerca de 150 parejas que cada año pierden a sus bebés por enfermedades mitocondriales
Los bebés con dos madres pueden ser más sanos
El Parlamento británico votará esta tarde una legislación que autorizaría una técnica de reproducción asistida que utiliza el ADN de tres personas. De aprobarse esta técnica, que ha suscitado un enconado debate ético y que cuenta con la oposición de la Iglesia, Reino Unido se convertiría en el primer país que da luz verde a los llamados bebés de tres padres, y ayudaría a cerca de 150 parejas que cada año pierden a sus bebés por enfermedades mitocondriales.
De lo que se trata, esencialmente, es de una especie de trasplante de órganos a escala microscópica, o un trasplante in vitro de orgánulos celulares. Las células están formadas por el núcleo y el citoplasma. El primero contiene el ADN. Y en el citoplasma están los pequeños órganos u orgánulos que llevan a cabo las instrucciones del ADN. Uno de ellos son las mitocondrias, que transforman el alimento en energía para la célula y contienen una pequeña porción de ADN extranuclear importante para el desarrollo de esa labor.
En las enfermedades mitocondriales, estos pequeños órganos de la célula, que se transmiten por vía materna, no funcionan correctamente. De manera que los bebés que nacen con estas células dañadas pueden sufrir daños cerebrales, pérdida de masa muscular, fallo cardíaco y ceguera, y en muchos casos fallecen antes del primer año de vida. Solo un trasplante puede salvarlos pero, para que afecte a cada una de las cien trillones de células que hay en un cuerpo, este debe realizarse inmediatamente después de la concepción. Por eso se necesita utilizar técnicas de fecundación in vitro.
La tecnología de los 'tres padres'
La técnica que se votará esta tarde, desarrollada en Newcastle, combina el ADN de los dos progenitores con la mitocondria sana de una donante mujer. De ahí el nombre popular de los tres padres. Aunque, de hecho, sería más correcto hablar de 2,002 padres, ya que solo casi el 0,2% (en concreto, el 0,18%) del ADN de la donante pasaría al embrión y, aunque sí se transmitiría a generaciones posteriores, no afectaría a características esenciales del individuo. También los órganos trasplantados convencionalmente contienen ADN del donante, y no se mezclan sus características genéticas con las del receptor de una manera relevante.
Altos estamentos de la Iglesia de Inglaterra han pedido el voto en contra
Básicamente el proceso es el siguiente. Se fertilizan dos óvulos, uno de la madre y otro de la donante, con espermatozoides del padre. Se retira el núcleo de los dos embriones resultantes, y solo se conserva el creado por los padres. Ese núcleo se introduce en el embrión de la donante, sustituyendo al núcleo que se ha desechado. Y el embrión resultante se coloca en el útero de la madre. Lo mismo se puede hacer a escala de óvulo, antes de la fertilización. En ambos casos, el cambio sería permanente y la futura descendencia del bebé que naciera con esta técnica estaría también libre de la enfermedad mitocondrial.
Julio Montoya, especialista en patología mitocondrial, explica que la terapia es esperanzadora y “muy buena”. Además técnicamente no es muy compleja. “Estamos expectantes a ver qué sucede”, comenta este catedrático en Bioquímica de la Universidad de Zaragoza, que colabora como asesor científico con la Asociación de Enfermos de Patologías Mitocondriales.
Sin embargo, a pesar de los avales recibidos, incluso por un grupo de premios Nobel, en ciencia el riesgo cero no existe. Montoya plantea dos incertidumbres. La actividad de las mitocondrias no solo viene regulada por las proteínas producidas por el ADN de estos orgánulos (apenas 37 genes), sino también por las que produce el núcleo de la célula (con unos 20.000 genes). Como la técnica da como resultado la combinación en la misma célula de mitocondrias de donante con un núcleo celular de origen distinto (de los padres) cabe la posibilidad de que las proteínas mitocondriales y las de núcleo celular sean incompatibles. Y, por ello, se produzcan errores en la fábrica de energía en la célula y las patologías asociadas a esta disfunción, precisamente lo que se pretende evitar.
Es una investigación sugerida por los pacientes, aprobada por los pacientes y es para los pacientes"
Hay otro riesgo, menos grave. La técnica implica transferir el núcleo del embrión de los padres o del óvulo de la madre a óvulos o embriones de donante. En esta operación se podrían arrastrar mitocondrias enfermas a los óvulos o embriones huéspedes. Si fueran pocas, el riesgo de enfermedad sería muy bajo. Aunque, en el caso de las niñas, seguirían siendo portadoras (y transmisoras) de mitocondrias afectadas.
Altos estamentos de la Iglesia de Inglaterra y determinados miembros de la comunidad científica han pedido el voto en contra de la aprobación de esta legislación, pues consideran que la técnica plantea aún determinadas incertidumbres éticas. La oposición de la Iglesia radica, en parte, en que la técnica implica la destrucción de un embrión, y en que consideran que podría abrir la puerta a futuras modificaciones genéticas en los embriones. Pero esta técnica en sí misma no supone la alteración del ADN nuclear, de modo que no podría utilizarse para la ingeniería genética o el diseño de bebés. Dos hermanos, uno de los cuales haya pasado por un trasplante mitocondrial, no serían más diferentes entre sí que dos hermanos que no lo hayan pasado.
Doug Turnbull, director del centro Wellcome Trust para la investigación mitocondrial, donde se ha desarrollado esta técnica pionera, ha pedido el voto a favor de los diputados. “Es una investigación sugerida por los pacientes, aprobada por los pacientes y es para los pacientes, ese es el mensaje importante”, ha declarado a la BBC. Le apoyan premios Nóbel británicos, 40 científicos de primera línea de 14 países y diferentes asociaciones de bioética.
El Gobierno británico de David Cameron –una coalición formada por conservadores y liberal demócratas- apoya el procedimiento, pero los diputados tendrán voto libre, por tratarse de un tema muy sensible.
En caso de que el Parlamento apruebe (hoy a partir de las 16.00, hora peninsular española) esta enmienda a la Ley de Embriología y Fertilización Humana de 2008, la Autoridad de Embriología y Fertilización Humana aprobará la licencia para que se empiece a aplicar la técnica. Si eso sucede, el primer bebé con material genético de tres personas podría nacer en 2016.
Una técnica no permitida en España
En España no está sobre la mesa la aprobación de esta técnica, que no está permitida por la ley de reproducción asistida, como explica Ana Ruiz, vocal de la junta directiva de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF). Contrariamente a lo que sucedió la década pasada sobre el intenso debate que se generó sobre la selección genética de embriones para curar a hermanos enfermos, impulsado por familias que vieron en esta opción una salida para la patología incurable que sufrían sus hijos, en este caso, apenas hay demanda para autorizar esta terapia.
“En la SEF no se ha planteado esta cuestión, no nos han llegado tampoco noticias de que se haya solicitado la autorización de este procedimiento en España”, comenta. Ruiz reconoce que, en las reuniones de la sociedad sí se ha llegado a debatir, sin embargo, sobre otras posibilidades que ofrece la reproducción asistida prohibidas en España sobre los que existe mayor demanda social, como la maternidad subrogada (las madres de alquiler). Ruiz explica que el motivo sea, probablemente, la baja incidencia de las enfermedades mitocondriales.
Si alguna familia hubiera solicitado acogerse a esta técnica a alguna de las clínicas de reproducción asistida que hay en España, la petición habría llegado al Comité Nacional de Reproducción Humana Asistida para su autorización como procedimiento experimental. Y no ha sido el caso, según indican desde el entorno de este organismo consultivo del Ministerio de Sanidad.
Fuente (http://elpais.com/elpais/2015/02/03/ciencia/1422963738_504035.html)
Debo decir que me encuentro en una disyuntiva en este aspecto. Por un lado considero que si tuviese una herencia genética mala me gustaría no trasmitírsela a mis posibles hijos; también está el hecho de cada uno debería ser libre sobre con quién quiere tener hijos(*), pero por otro lado la decisión que tome estaría afectando a otro individuo, a diferencia de hoy en día en donde muchos casos lo que juega es el azar, el destino, o si se quiere “la voluntad del propio ser que crece en el vientre materno”.
(*) Está el tema de la decisión del donador, ojo.
Reino Unido debate hoy autorizar el primer bebé con tres padres genéticos
La técnica ayudaría a cerca de 150 parejas que cada año pierden a sus bebés por enfermedades mitocondriales
Los bebés con dos madres pueden ser más sanos
El Parlamento británico votará esta tarde una legislación que autorizaría una técnica de reproducción asistida que utiliza el ADN de tres personas. De aprobarse esta técnica, que ha suscitado un enconado debate ético y que cuenta con la oposición de la Iglesia, Reino Unido se convertiría en el primer país que da luz verde a los llamados bebés de tres padres, y ayudaría a cerca de 150 parejas que cada año pierden a sus bebés por enfermedades mitocondriales.
De lo que se trata, esencialmente, es de una especie de trasplante de órganos a escala microscópica, o un trasplante in vitro de orgánulos celulares. Las células están formadas por el núcleo y el citoplasma. El primero contiene el ADN. Y en el citoplasma están los pequeños órganos u orgánulos que llevan a cabo las instrucciones del ADN. Uno de ellos son las mitocondrias, que transforman el alimento en energía para la célula y contienen una pequeña porción de ADN extranuclear importante para el desarrollo de esa labor.
En las enfermedades mitocondriales, estos pequeños órganos de la célula, que se transmiten por vía materna, no funcionan correctamente. De manera que los bebés que nacen con estas células dañadas pueden sufrir daños cerebrales, pérdida de masa muscular, fallo cardíaco y ceguera, y en muchos casos fallecen antes del primer año de vida. Solo un trasplante puede salvarlos pero, para que afecte a cada una de las cien trillones de células que hay en un cuerpo, este debe realizarse inmediatamente después de la concepción. Por eso se necesita utilizar técnicas de fecundación in vitro.
La tecnología de los 'tres padres'
La técnica que se votará esta tarde, desarrollada en Newcastle, combina el ADN de los dos progenitores con la mitocondria sana de una donante mujer. De ahí el nombre popular de los tres padres. Aunque, de hecho, sería más correcto hablar de 2,002 padres, ya que solo casi el 0,2% (en concreto, el 0,18%) del ADN de la donante pasaría al embrión y, aunque sí se transmitiría a generaciones posteriores, no afectaría a características esenciales del individuo. También los órganos trasplantados convencionalmente contienen ADN del donante, y no se mezclan sus características genéticas con las del receptor de una manera relevante.
Altos estamentos de la Iglesia de Inglaterra han pedido el voto en contra
Básicamente el proceso es el siguiente. Se fertilizan dos óvulos, uno de la madre y otro de la donante, con espermatozoides del padre. Se retira el núcleo de los dos embriones resultantes, y solo se conserva el creado por los padres. Ese núcleo se introduce en el embrión de la donante, sustituyendo al núcleo que se ha desechado. Y el embrión resultante se coloca en el útero de la madre. Lo mismo se puede hacer a escala de óvulo, antes de la fertilización. En ambos casos, el cambio sería permanente y la futura descendencia del bebé que naciera con esta técnica estaría también libre de la enfermedad mitocondrial.
Julio Montoya, especialista en patología mitocondrial, explica que la terapia es esperanzadora y “muy buena”. Además técnicamente no es muy compleja. “Estamos expectantes a ver qué sucede”, comenta este catedrático en Bioquímica de la Universidad de Zaragoza, que colabora como asesor científico con la Asociación de Enfermos de Patologías Mitocondriales.
Sin embargo, a pesar de los avales recibidos, incluso por un grupo de premios Nobel, en ciencia el riesgo cero no existe. Montoya plantea dos incertidumbres. La actividad de las mitocondrias no solo viene regulada por las proteínas producidas por el ADN de estos orgánulos (apenas 37 genes), sino también por las que produce el núcleo de la célula (con unos 20.000 genes). Como la técnica da como resultado la combinación en la misma célula de mitocondrias de donante con un núcleo celular de origen distinto (de los padres) cabe la posibilidad de que las proteínas mitocondriales y las de núcleo celular sean incompatibles. Y, por ello, se produzcan errores en la fábrica de energía en la célula y las patologías asociadas a esta disfunción, precisamente lo que se pretende evitar.
Es una investigación sugerida por los pacientes, aprobada por los pacientes y es para los pacientes"
Hay otro riesgo, menos grave. La técnica implica transferir el núcleo del embrión de los padres o del óvulo de la madre a óvulos o embriones de donante. En esta operación se podrían arrastrar mitocondrias enfermas a los óvulos o embriones huéspedes. Si fueran pocas, el riesgo de enfermedad sería muy bajo. Aunque, en el caso de las niñas, seguirían siendo portadoras (y transmisoras) de mitocondrias afectadas.
Altos estamentos de la Iglesia de Inglaterra y determinados miembros de la comunidad científica han pedido el voto en contra de la aprobación de esta legislación, pues consideran que la técnica plantea aún determinadas incertidumbres éticas. La oposición de la Iglesia radica, en parte, en que la técnica implica la destrucción de un embrión, y en que consideran que podría abrir la puerta a futuras modificaciones genéticas en los embriones. Pero esta técnica en sí misma no supone la alteración del ADN nuclear, de modo que no podría utilizarse para la ingeniería genética o el diseño de bebés. Dos hermanos, uno de los cuales haya pasado por un trasplante mitocondrial, no serían más diferentes entre sí que dos hermanos que no lo hayan pasado.
Doug Turnbull, director del centro Wellcome Trust para la investigación mitocondrial, donde se ha desarrollado esta técnica pionera, ha pedido el voto a favor de los diputados. “Es una investigación sugerida por los pacientes, aprobada por los pacientes y es para los pacientes, ese es el mensaje importante”, ha declarado a la BBC. Le apoyan premios Nóbel británicos, 40 científicos de primera línea de 14 países y diferentes asociaciones de bioética.
El Gobierno británico de David Cameron –una coalición formada por conservadores y liberal demócratas- apoya el procedimiento, pero los diputados tendrán voto libre, por tratarse de un tema muy sensible.
En caso de que el Parlamento apruebe (hoy a partir de las 16.00, hora peninsular española) esta enmienda a la Ley de Embriología y Fertilización Humana de 2008, la Autoridad de Embriología y Fertilización Humana aprobará la licencia para que se empiece a aplicar la técnica. Si eso sucede, el primer bebé con material genético de tres personas podría nacer en 2016.
Una técnica no permitida en España
En España no está sobre la mesa la aprobación de esta técnica, que no está permitida por la ley de reproducción asistida, como explica Ana Ruiz, vocal de la junta directiva de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF). Contrariamente a lo que sucedió la década pasada sobre el intenso debate que se generó sobre la selección genética de embriones para curar a hermanos enfermos, impulsado por familias que vieron en esta opción una salida para la patología incurable que sufrían sus hijos, en este caso, apenas hay demanda para autorizar esta terapia.
“En la SEF no se ha planteado esta cuestión, no nos han llegado tampoco noticias de que se haya solicitado la autorización de este procedimiento en España”, comenta. Ruiz reconoce que, en las reuniones de la sociedad sí se ha llegado a debatir, sin embargo, sobre otras posibilidades que ofrece la reproducción asistida prohibidas en España sobre los que existe mayor demanda social, como la maternidad subrogada (las madres de alquiler). Ruiz explica que el motivo sea, probablemente, la baja incidencia de las enfermedades mitocondriales.
Si alguna familia hubiera solicitado acogerse a esta técnica a alguna de las clínicas de reproducción asistida que hay en España, la petición habría llegado al Comité Nacional de Reproducción Humana Asistida para su autorización como procedimiento experimental. Y no ha sido el caso, según indican desde el entorno de este organismo consultivo del Ministerio de Sanidad.
Fuente (http://elpais.com/elpais/2015/02/03/ciencia/1422963738_504035.html)
Debo decir que me encuentro en una disyuntiva en este aspecto. Por un lado considero que si tuviese una herencia genética mala me gustaría no trasmitírsela a mis posibles hijos; también está el hecho de cada uno debería ser libre sobre con quién quiere tener hijos(*), pero por otro lado la decisión que tome estaría afectando a otro individuo, a diferencia de hoy en día en donde muchos casos lo que juega es el azar, el destino, o si se quiere “la voluntad del propio ser que crece en el vientre materno”.
(*) Está el tema de la decisión del donador, ojo.